Así que simplemente lo hice. No lo pensé mucho y creo que fue lo más inteligente. No os podéis imaginar lo complicado que es para mí. Visto con perspectiva, podría juntar tantas razones para no haberlo hecho, que ahora me da un poco de vértigo.
Me podría haber frenado el miedo, que por desgracia tantas veces me ha impulsado por la vida.
Otro motivo que siempre me ha influido demasiado es el qué dirán los demás. Siempre pendiente de estar en mi papel. Intentando que nadie pueda pensar nada negativo de mí. Fui capaz de dejar de hacer tantas cosas que, el día que me toque echar cuentas, sé que dolerá demasiado.
La inseguridad sería una suma de las dos anteriores, y también hace que me plantee tantas veces las cosas que, lo que hice, podría parecer sorprendente hasta para mí.
El conformismo completa el rompecabezas. Es tan fácil ser conformista, que muchas veces con eso me conformo.
No os podéis imaginar lo difícil que fue simplemente hacerlo, así que dejadme que lo disfrute un rato.