Cuando, por fin, su mejor obra ha sido reconocida. No me lo puedo creer.
Tantas horas, tanto trabajo, tanta dedicación. El sufrimiento que hay detrás de tantas puertas que se cierran antes de dar una primera oportunidad.
La cantidad de recursos que fue agotando para ir dando a luz pedacitos de sí mismo. Nos fue regalando durante tanto tiempo, y nosotros no supimos darnos cuenta. Tantos años mirando. Si tan solo hubiésemos sido capaces de observar un poco más.
Cuando por fin su mejor obra ha sido reconocida.
Y ahora le toca navegar. Subir a la cresta de la ola sin saber cómo bajar de allí.
Vacío de ideas.
Todo quedó en su última obra, y ahora solo le queda cruzar los dedos, y esperar que las musas vengan de visita.
La desgracia de una artista. Cuando por fin su mejor obra ha sido reconocida, a él no le queda nada más por ofrecer.
Sánchez Cubillo 
El vacío después de acabar un trabajo. Pero con el tiempo siempre se vuelve a llenar. Hay que tener paciencia y alimentar a la bestia.
Ñ
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Maquinalmente pasaban los días en aquella vieja casona en el sur de Francia que conocí cuando el abuelo murió,fue entonces cuando supe de donde provenía mi vena artística,conocer aquella casa fue sinónimo de conocer a mi abuelo también,recorriendo las diferentes estancias aquel verano poco a poco fui visualizando las vivencias que mi padre de pequeño me contó.
Cuando pensé en retomar mi arte necesitaba un lugar espacioso pero a la par íntimo para poder inspirarme,en la parte alta de la casa tras una puerta que pensaba no me aportaría nada más que un trastero olvidado,descubrí el lugar idóneo para dialogar con las musas.
Allí encontré los tubos de pintura seca,pinceles raídos por el tiempo y junto a la puerta un viejo catre que utilizaba para confinarse durante meses cuando las ideas no fluian,ni que decir tenía que a nadie se le ocurriera molestar,solamente la chica de servicio que todos los días dejaba la comida detrás de la puerta en una bandeja,aquel era el paraíso que destilaba la personalidad de este hombre por todas partes.
Pero lo que realmente me impacto,fue un colosal retrato de una chica morena que se situaba sobrecel viejo escritorio,supe desde ya que aquel no era un retrato más,al examinarlo desde cerca y tratar de retirar el polvo y las telarañas acumulados durante años cayó del reverso un viejo documento firmado por mi abuelo donde se podía distinguir una dedicatoria a una tal Gloria;’mi gran y único amor’rezaba en aquel viejo papel.
Gloria’la bruja de Caldeya’un pueblecito de la cercana costa catalana refugio de artistas españoles que añorabann su país y allí de incógnito pasaban temporadas en los lejanos años sesenta.Dijo mi padre cuando le conté el hallazgo…
Fuente;Los organillos,Henry Francois Rey.
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