Ganarse unos cuantos amigos es algo que le ha llevado más de media vida a ese pobre tonto. Tantos años en los que fue aprendiendo a dejar huecos cada vez más grandes dentro de esa armadura tan férrea. Por eso no puedo evitar mirarle con tanta pena, porque los años pasan, pero él parece no aprender. Las semillas son el origen de todo, pero hace falta de un todo para que estas cumplan su función. Me da lástima cuando se olvida de regar cada día. De podar. De disfrutar de su belleza. Tanta pena. La misma que el espejo me devuelve sin enseñarme que mañana será demasiado tarde.
Ganarse unos cuantos amigos
