Sin efecto. Ninguna chispa brotaba por el aire. Ninguna lona se dejaba caer para mostrar lo que se ocultaba detrás. Nadie se levantó para aplaudir lo más increíble que habían presenciado en su vida. Era magia de verdad. El mejor truco jamás inventado. Todo delante de sus ojos. Magia. Nadie podía creer que eso fuese real y, sin embargo, nunca llegó a tener el éxito que tanto merecía. Mientras veía el fondo de la botella comprendió que era mejor aparentar ser buen mago, que realmente convertirse en uno. Su último truco le hizo realmente famoso, aunque no llegó a tiempo de disfrutarlo.
Sin efecto
